A veces, lo que no se ve también duele. Por eso, estudiantes de Psicología vivieron una experiencia profunda y transformadora al visitar el Hospital Psiquiátrico “San Juan de Dios”
Más allá de las paredes, conocieron historias reales, luchas silenciosas y miradas que decían más que mil palabras. Escuchar, observar y comprender fue la lección del día
Fue una visita que no solo conectó teoría con práctica, sino corazón con corazón. Porque estudiar Psicología también significa abrazar la humanidad del otro
Nuestros estudiantes no fueron solo visitantes: fueron presencia, escucha, compañía y empatía. Un paso más hacia una profesión con propósito
Gracias a quienes participaron con respeto y entrega. ¡Sigamos formando profesionales que miran con los ojos… pero también con el alma!